Para hacer la división de palabras según las diferentes partes de la oración, se han seguido a través de la historia diferentes puntos de vista.
Los principales puntos de vista son los siguientes:
1) Criterio semántico.
Las palabras se dividirán según los significados que expresan:
Sustancias ( nombres): clavel, libro, acero, mar.
Cualidades de la sustancia (adjetivos): rojo, grande, azul.
Acciones ( verbos): andar, beber, escribir.
Cualidades de la acción (adverbios): Tarde, mucho, temprano.
Ese criterio semántico no se sigue hoy porque, en primer lugar, no es valido para caracterizar aquellas palabras que tienen sólo sentido gramatical (determinantes, verbos auxiliares, conjunciones, preposiciones) y, en segundo lugar, no sirve para caracterizar bien aquellas palabras que poseen un significado léxico que no corresponde a su categoría gramatical. Por ejemplo, belleza, justicia, altura, son nombres, pero no significan sustancia; entierro, baile, pelea son nombres, peor no significan sustancia, sino acción.
2) Criterio morfológico.
Este punto de vista divide las palabras de acuerdo con los morfemas con que pueden combinarse, así, and- puede combinarse con desinencias (and-o, and-as, etc.) y sería verbo. La palabra muchacho es el producto de combinar el lexema muchach- con el morfema de genero -o y el morfema de número; y y puede aparecer con los morfemas -a (femenino) y -s (plural). Esto mismo sucede con otras palabras que correspondieran al principio de aceptar los morfemas de genero y/o número serían nombres.
Sin embargo, este punto de vista no es exacto puesto que el adjetivo -otra parte de la oración- tiene estas mismas posibilidades morfológicas: buen- + -o = bueno; buen- + -a + -s = buenas, y este criterio no resulta valido para las palabras invariables de la oración( preposiciones, conjunciones, adverbio). Este criterio es útil como complemento de otro.
3) Criterio sintáctico
Es el que se ha señalado anteriormente cuando se habló de las relaciones paradigmaticas y sintagmáticas. Este criterio agrupa las palabras según la función que desempeñan en la oración. Por ejemplo, las palabras clavel, libro, acero, mar, belleza, justicia, altura, entierro, baile, y pelea son nombres por que pueden funcionar como sujeto de una oración; ando, bebes, escribes, son verbos porque pueden funcionar como núcleo del predicado en una oración; rojo, grande, azul, duro, son adjetivos porque pueden funcionar como complementos de un nombre en una oración.
LAS PARTES DE LA ORACIÓN, POR TANTO, SE CLASIFICAN POR SUS RELACIONES PARADIGMÁTICAS Y SINTAGMÁTICAS.
Todas las palabras que forman una clase de palabras o una parte de la oración responden a unas mismas propiedades morfológicas (todos los nombres aceptan morfemas de género y/o número; todos los verbos se conjugan, todas las conjunciones son invariables).
EN ESPAÑOL ENCONTRAMOS LAS SIGUIENTES PARTES DE LA ORACIÓN: NOMBRE, ADJETIVO, DETERMINANTES, VERBO, ADVERBIO, PREPOSICIÓN Y CONJUNCIÓN.
En otros tiempos se incluía entre las partes de la oración la interjección, pero hoy no se acepta como tal, porque la interjección equivale a una oración completa, por eso va siempre con entonación independiente (entre pausas) en el habla y entre comas en la lengua escrita. Por ejemplo: ¡Ay!, ¡que bien me siento!, la besó y, ¡zas!, ella le dio una bofetada.
Las partes de la oración se dividen en dos clases: las partes mayores y las partes menores.
Las partes mayores son las que tienen significado léxico. Son el nombre, el adjetivo, el verbo y el adverbio.
Las partes menores son las que tienen sólo significado gramatical. Son el determinante, la preposición y la conjunción.
En esta clasificación se excluye el pronombre porque funciona siempre como sustituto.
Como esta división de las partes de la oración la hemos hecho de acuerdo con el criterio semántico, siguiendo éste podemos ahora establecer dentro de las partes mayores de la oración una subdivisión.
En la oración
El profesor joven estudia mucho
Hallamos las cuatro partes de la oración: un nombre (profesor), un adjetivo (joven), un verbo (estudia) y un adverbio ( mucho), pero la importancia de estas cuatro partes son diferentes, tienen un rango distinto según las funciones que desempeñan.
Se advierte que profesor posee la función sintáctica de mayor importancia o e rango, por que es el profesor de quien se dice que es joven y que estudia. Estas dos palabras, tienen, por tanto, un rango menor porque dependen de profesor. Y el rango de mucho es todavía más pequeño, porque se refiere a estudia, que es una palabra dependiente a su vez de profesor.
En esa oración hay, por tanto, tres rangos:
Rango primario: el nombre profesor
Rango secundario: el adjetivo joven y el verbo estudia.
Rango terciario: el adverbio mucho.
Siguiendo el criterio sintáctico podemos definir cuatro partes de la oración como:
Nombre o sustantivo: es toda palabra que puede ocupar la función de rango primario en la oración (sujeto)
Adjetivo y verbo: son aquellas palabras que pueden desempeñar la función de rango secundario en la oración.
Adverbio: es aquella palabra que puede ocupar la función de rango terciario en la oración.
Se afirma que cada una de estas cuatro partes pueden desempeñar estas funciones porque en algunas oraciones estas partes se encuentran en rangos diferentes a los que hemos visto ahora. Así en:
El profesor estudia muy lentamente.
se observa que muy (adverbio) ocupa un rango cuaternario, pues se refiere a lentamente ( otro adverbio), que posee un rango terciario.
Los rangos señalados anteriormente son los máximos que pueden ocupar cada una de estas partes.